martes, 1 de noviembre de 2011

Reserva Marina de Cabo de Palos e Islas Hormigas

La reserva marina, situada en Cartagena, es un espacio natural submarino que abarca unos 19 Km2 entre el faro de Cabo de Palos y las Islas Hormigas.
Esta reserva, protegida en 1995 con el fin de preservar su flora y fauna e incuida como LIC en la Red Natura 2000 de la Unión Europea, tiene unas zonas totalmente protegidas donde está prohibido cualquier tipo de actividad y otras zonas donde se permiten ciertos tipos de actividad con algunas restricciones, como el buceo.

Podemos decir que la reserva de Islas Hormigas tiene básicamente diez puntos de inmersión, aunque muchos otros afirmarán que el número es distinto. Como todo, cada cosa es diferente en función del ojo que lo mira o la perspectiva que se le da. Pero, a mi juicio, los puntos de inmersión son: Bajo de Testa, Piles 1, Piles 2, el Jardín de los Piles, la Morra, el Pico Pelao, el Desfiladero, Bajo de Enmedio, Bajo de Dentro y Bajo de Fuera.


En mi opinión (y me consta que la de muchos otros), Septiembre es un mes fantástico para bucear en estas aguas ya que es la época del año en la que entran los grandes bancos de bogas. Y digo esto porque el buceador puede presenciar un auténtico espectáculo observando el movimiento coordinado de las grandes masas de peces al ser atacadas por los depredadores.

Tres fueron las inmersiones que pudimos hacer este pasado mes de Septiembre:

1ª. De la Morra al Piles 1 (inmersión caribeña)
2ª. Bajo de Dentro
3ª. Piles 2

De todas ellas se obtiene una idea clara: "estas aguas son por excelencia el hogar del mero", cuyos ejemplares llegan a ponerse delante de ti mirándote fijamente a menos de un metro. Aunque no solo disfrutas observado esta especie, sino que también puedes admirar los grandes bancos de barracudas (que también se acercan mucho a los buceadores), abadejos, dentones, morenas o sargos reales, algunas especies más pequeñas como los gobios o los siempre difíciles de ver nudibranquios y, por supuesto, los grandes bancos de bogas con su increible espectáculo.

Se puede afirmar que la reserva marina del Cabo de Palos es un lugar donde cualquier aficionado al submarisnismo tiene la total garantía de disfrutar de una muy buena inmersión.
Para ello hay multitud de clubes en la zona donde se goza buen ambiente y buenos materiales. Nosotros elegimos (por recomendación) Balkysub (http://www.balkysub.com/index.php) y no nos arrepentimos en absoluto. Aunque tú decidirás qué club te interesa más la próxima vez que acudas a bucear a la zona.

Para terminar, la única anécdota negativa de esta experiencia fue que en la segunda inmersión perdí mi cámara submarina ya que, al terminar la inmersión, tras haber realizado la parada de seguridad y estar casi en reserva, mi cámara cayó a un fondo de más de 40 metros sin que yo pudiera hacer nada.
Así que, si acudes al Bajo de Dentro, te gusta el buceo profundo y encuentras una minicámara... acuérdate de mi!!!

Un abrazo y mucho ojo con las corrientes de esta zona!!!

lunes, 19 de septiembre de 2011

Reserva de Garajau

La Reserva Natural de Garajau está situada al sureste de la portuguesa isla de Madeira. Se trata de la única reserva marina protegida de todo Portugal. Creada en 1986, ofrece unas condiciones únicas como zona protegida, no solo porque posee una perfecta ubicación geográfica, sino por su diversidad biológica y sus extraordinarias aguas cristalinas, que pueden generar mucho interés científico, recreativo y turístico. No está permitida la pesca y hay patrullas de guardacostas que regularmente intentan mantener intacta la reserva. Todo ello hace de esta región un punto de gran interés para el buceo.

Existen un gran número de clubes de buceo en la isla, como "Diving Center Madeira", "Tubarao Madeira", "Madeira Oceano's", "Inmersao Aventura e Desporto", etc... Nosotros elegimos "Manta Diving Center" (http://www.mantadiving.com/), un centro de buceo situado en la localidad de Canico de Baixo, en las instalaciones del hotel Galo Resort, en plena reserva marina. El centro, regentado por el alemán Stefan, goza de buen ambiente y buenos equipos pero, si no sabes hablar inglés, es posible que tengas más de un problema. Incluso hablando inglés medianamente puedes tener problemas, ya que alguno de los guías solo habla alemán. Nuestras caras debieron ser un poema en más de una ocasión al escuchar los briefings pre-inmersión en habla germana.
Pero bueno, superadas los pequeñas dificultades del idioma, nos dedicamos a disfrutar de la biodiversidad que ofrece la reserva.


Como puede verse en la imagen, existen varios puntos de inmersión. Nosotros buceamos en Arena y Lavafinger (dos veces en la segunda).
Lo primero que descubrimos al sumergirnos en el agua fue que el número de especies que habíamos visto hasta el momento en otros lugares no era nada comparado con lo que allí se veía. Apenas a cinco metros de profundidad podías ver numerosos seres vivos en cualquier dirección en la que centrases la vista. Desde pequeños ejemplares como los peces doncella, los gusanos de fuego, los cangrejos araña, etc, hasta grandes ejemplares como la morena (negra y moteada), el mero y la barracuda. Aunque estos últimos no los vimos hasta sumergirnos a una mayor profundidad.

Las especies que más abundan en la zona son, sin lugar a dudas, el pez loro, la castañuela (común y negra) el fredi y la doncella. Mires donde mires, siempre hay un grupo de alguna de estas especies.
Pero no solo disfrutas observando estas especies, sino que la reserva marina te brinda la oportunidad de disfrutar de muchos otros ejemplares de mayor tamaño, lo que convierte cada inmersión en una experiencia inolvidable.
Siempre podremos decir con satisfacción que buceamos en un lugar maravilloso donde disfrutamos observando las siguientes especies bajo el agua: peces loro, sargos (común y real), mojarras, salpas, lisas, fredis, doncellas, castañuelas (común y negra), meros, anguilas de jardín, morenas (moteadas y negras), barracudas, peces lagarto, peces cofre, peces globo, rascacios, escórporas, gusanos de fuego, cangrejos araña, estrellas de mar, pulpos, sepias y erizos de diversos tamaños y colores.
No está nada mal!!! Y seguro que algunas otras especies pasaron por delante de nuestros ojos sin que nos diésemos cuenta o sin que supiésemos identificarlas.

En definitiva... UN LUGAR 100% RECOMENDABLE PARA DISFRUTAR DEL BUCEO.

miércoles, 24 de agosto de 2011

"Los Arcos" (Calpe)

Calpe es un lugar muy recomendable para el buceo de iniciación debido a la ausencia casi total de corrientes y a la poca profundidad de la zona. Aunque siempre cabe la posibilidad de encontrarse con algo de mar de fondo que puede balancearte durante un largo rato.
La mayoría de inmersiones se realizan alrededor del Peñón de Ifach y pueden ser consideradas como sencillas y entretenidas.
No siempre se disfruta de buena visibilidad, ya que el viento provoca olas que remueven el fondo y hace que en muchas ocasiones no se vea más allá de 5 ó 6 metros. Aunque esto no es la tónica general ni mucho menos.
De todos los puntos de inmersión, uno de los mejores (a mi juicio) es el conocido como "Los Arcos".
Se trata de una zona con una profundidad que oscila entre los 7 y los 13 metros, donde se puede disfrutar de una inmersión entre túneles y arcos de piedra de diversos tamaños.
El buceador puede divertirse pasando desde pequeños túneles donde apenas cabe una persona hasta grandes arcos bajo los que se refugian grupos de sargos y mojarras. Eso es lo que hace que sea divertida, independientemente de que veamos más o menos fauna marina.
Hay que tener en cuenta que muchas veces, el buceador se tira de la embarcación y, tras unos minutos en el fondo, descubre que no va a ser su día. Mire donde mire, descubre con cierta resignación que apenas hay vida. Busca en cada grieta... cada piedra... y no consigue ver ningún ser vivo (sobre todo durante los primeros meses de la temporada de buceo).
Ante esta situación, los Arcos te ofrece otro entretenimiento, que es disfrutar jugando y pasando por sitios estrechos, admirar y pasar bajo los grandes arcos formados por la erosión producida por el agua en la roca, etc.

Aquí incluyo el enlace a un video de una de las inmersiones que hice en los Arcos el mes de Julio de 2011 junto con un grupo de alumnos Open Water.


domingo, 24 de abril de 2011

Apnea, una práctica no exenta de riesgos

El buceo en apnea o buceo libre es aquel que se realiza sin suministro adicional de aire o, como suele decirse coloquialmente, "a pulmón".
Las personas tienden a pensar que esta práctica deportiva está exenta de riesgos, considerando el peligro de quedarse sin aire como único factor de riesgo. Pero es mucho más complejo que eso.
Esta práctica supone someter al cuerpo humano a una interrupción total del suministro de aire, por lo que el oxígeno disminuye hasta niveles que pueden llegar a resultar peligrosos.

Hay que tener en cuenta que la necesidad de respirar se produce por la acumulación de dióxido de carbono en el cuerpo, no por la falta de oxígeno. Por eso, los apneistas utilizan la hiperventilación, que es una práctica consistente en hacer 3 ó 4 respiraciones profundas antes de sumergirse, para bajar los niveles de dióxido de carbono y retrasar la sensación de falta de aire, prolongando así el tiempo de inmersión.
Aunque los buceadores deben ser muy ciudadosos a la hora de realizar esta práctica, ya que una hiperventilación excesiva puede reducir los niveles de dióxido de carbono tanto que el cuerpo se quede sin oxígeno antes de notar necesidad de respirar. Esto provoca la inconsciencia repentina y, si nadie puede socorrerte, la muerte por ahogamiento.

Otro problema ligado a la apnea que ocasiona un gran número de accidentes es el síncope hipóxico, también conocido como el síncope de los siete metros, síncope de las aguas bajas o shallow water blackout.
Este fenómeno supone un desmayo repentino por un descenso brusco del nivel de oxígeno en la sangre. La causa de este descenso repentino es la disminución de la presión que experimenta el buceador a medida que asciende a la superficie desde una profundidad de entre 15 y 20 metros, ya que los pulmones se expanden e invierten el proceso de intercambio de gases que se produce en los alveolos, pasando estos a aborver el oxígeno del torrente sanguíneo.
A priori, si un buceador sufre este síncope y es rescatado inmediatamente, no tiene porqué tener mayores consecuencias, ya que el peligro no radica en el desmayo, sino en el ahogamiento que se produce  durante el estado de inconsciencia del mismo. Aunque hay que tener en cuenta que, cuando los casos hipóxicos se repiten, pueden provocar lesiones irreversibles en el tejido cerebral a largo plazo. Por lo que no se puede tomar a la ligera.
Además, este fenómeno se agrava con la hiperventilación, ya que los tiempos de inmersión y la profundidad son mayores gracias a esta práctica (entre un 40% y 60%). Por lo que utilizar esta técnica requiere de mucho entrenamiento y mucha prudencia.

Por último, aunque no es muy común, no deja de ser importante el hecho de que durante la apnea, a pesar de que se interumpe la respiración,  el resto de procesos fisólógicos continúan, como el de absorción de nitrógeno por los tejidos. Por lo que el apneista no está exento de sufrir un ataque de descompresión.

Así que, al menos, dos ideas claras se desprenden de todo esto:

    1) Bucea con mucha precaución y siempre dentro de tus límites.

    2) Ve siempre acompañado y no pierdas la atención sobre tu compañero.

sábado, 29 de enero de 2011

Caída libre de Guillaume Néry



Guillaume Néry batió el record mundial de inmersión libre en 2010 alcanzando una profundidad de 202 metros. Dicha marca fue alcanzada en el Agujero Azul de Dean, situado en la Isla Larga, Bahamas, cuyo fondo se sitúa exactamente a 202 metros (donde llegó Néry).
http://www.guillaumenery.fr/#
El Dean´s Blue Hole está considerado como el agujero azul más profundo del mundo. Es semicircular en la superficie, donde tiene un diámetro de entre 25 y 35 metros. Y a la profundidad de 20 metros, el agujero se ensancha hasta los 100 metros de diámetro convirtiéndose en una inmensa caverna.
Este impresionante video es una representación artística de la proeza de Néry. Un descenso a las profundidades hasta alcanzar el fondo del agujero azul más grande conocido.